¿Cuánto esfuerzo se le debe dedicar para el desarrollo de un producto antes de su lanzamiento? Una tentación frecuente es no lanzar el producto hasta que uno sienta que tiene asegurado su éxito. Algunos emprendedores se niegan a aceptar que su idea innovadora es menos atractiva de lo que esperaban.
Un MVP (minimum viable product) es esa «versión de un nuevo producto que permite al equipo recoger la mayor cantidad de aprendizajes validado con los clientes y con el menor esfuerzo posible». El objetivo de un MVP es probar las hipótesis para la creación del negocio y comenzar el proceso de aprendizaje tan rápido como sea posible.
El MVP no es una versión inicial del producto final. Podría crearse con el uso de una tecnología completamente diferente, si eso ayuda a disminuir los costes inicialmente. Los procesos manuales pueden usarse para entregar partes menos críticas del nuevo servicio y el producto no tiene que ser escalable para atender a todas las necesidades del mercado. El MVP solo tiene que atender a una cantidad de usuarios que puedan probarlo para su posterior validación.
John Foley, el fundador de Peloton recurrió al crowdfunding a través de la plataforma Kickstarter para recaudar fondos. Grabó un vídeo corto para mostrar el prototipo y pidió a los clientes interesados que contribuyeran. Peloton recaudó $300.000 de aproximadamente 300 patrocinadores que hicieron pedidos anticipadamente de 165 bicicletas. El vídeo fue el MVP, ya que atrajo a los primeros clientes y permitió probar el concepto del producto. Peloton logró una recaudación de casi 1 mil millones de dólares de capital antes de la IPO en septiembre del 2019, la cual valoró a la empresa en aproximadamente 7,6 mil millones de dólares.
El método Lean Startup
El MVP es uno de los conceptos básicos que Eric Ries introdujo en su libro The Lean Startup. El método Lean tiene como objetivo la reducción de riesgos, time to market y costes para las nuevas empresas y productos. El autor nos explica como se puede obtener información sobre las necesidades de los clientes a través de una serie de experimentos.
Ries señaló que Nick Swinmurn, cofundador de Zappos, quería probar la idea de que los clientes estuvieran dispuestos a comprar calzado online. En lugar de crear una web y comprar estocaje, Swinmurn se dirigió a las tiendas locales, hizo un par de fotos de algunos modelos de sneakers y las publicó en la web. Después de haber hecho algunas ventas, compró el calzado a precio de venta y después lo envió a los clientes. Swinmurn decidió que la demanda de los clientes era buena y, con el tiempo, Zappos se convirtió en una empresa que facturó más de un billón de dolares en la venta de calzado.
La hipótesis más innovadora de Airbnb era que los viajeros estuviesen dispuestos a vivir en la casa de un desconocido y no en un hotel. Los fundadores de la empresa hicieron fotos de sus propios apartamentos para publicarlo en su web. Pronto surgieron tres invitados que querían hospedarse pagando su estancia.
Tecnología de reconocimiento facial
Los eventos deportivos avanzan hacia la venta de entradas vía smartphones, y muy pronto las entradas impresas desaparecerán. Panasonic cree que la tecnología de reconocimiento facial puede usarse para identificar a los visitantes.
A Panasonic le preocupaba que no todos los usuarios acepten esta tecnología que utiliza el reconocimiento facial. Para ello crearon un MVP para grupos más reducidos de personas en el cual este tema genera menos posibilidades de rechazo del uso de esta tecnología. El usuario medio no está en contra del uso de reconocimiento facial para detectar a las personas que cometen un fraude. Tampoco genera rechazo el uso del reconocimiento facial para dejar pasar a periodistas acreditados.
El sistema de reconocimiento facial de Panasonic ya se ha usado en proyectos piloto con el fin de aportar avances en la seguridad de los aficionados del FC Groningen. Las cámaras ubicadas en el control de acceso, reconocen de manera automática, las imágenes de los aficionados que tienen prohibido la entrada al estadio.
Periodismo deportivo
Alex Mather y Adam Hansmann comenzaron The Athletic con el objetivo de proporcionar una «cobertura más inteligente para los aficionados incondicionales”. La empresa ha sido fundada con un modelo de suscripción de pago en una época en que la opinión general era que el contenido de Internet debería ser gratuito. Claramente, la idea tiene un gran potencial internacional. Sin embargo, su MVP se lanzó en Chicago para cubrir a los Chicago Cubs (béisbol) y a los Blackhawks (hockey sobre hielo) para probar la idea de que los aficionados al deporte están dispuestos a pagar por un periodismo deportivo de calidad. Después de probar el MVP, The Athletic se expandió a casi 20 ciudades en los Estados Unidos y Canadá. Se lanzó en Europa en agosto del 2019, para cubrir el fútbol europeo.
El MVP acorta el tiempo para generar ingresos
La mayoría de los emprendedores, que no piensan en un MVP, lanzan su producto demasiado tarde. Pasan mucho tiempo tratando de alcanzar un nivel innecesario de excelencia. Lo que hace atractivo el concepto de MVP es que te obliga a pensar en lo que el usuario está dispuesto a pagar. El MVP no puede ser “viable”, a menos que alguien esté dispuesto a pagar por ello. Es la forma más eficiente de demostrar que alguien está dispuesto a pagar por un producto/servicio nuevo.
Olvídate de desarrollar productos/servicios perfectos y enfócate más en acceder al mercado con un producto/servicio que pueda generar ingresos y te permita conocer mejor a tus clientes.
Tania Víe